Tratan con Migración situación trabajadores haitianos en línea noroeste
Reporte Especial
Mao, Valverde, R.D. Solidaridad Fronteriza (SF), la Asociación de Productores de Banano (ADOBANANO), la Asociación Solidaria de Obreros Migrantes de la Línea Noroeste (ASOMILIN) y Caritas Diocesana, sostuvieron en el día de ayer un encuentro con la Dirección General de Migración (DGM), el Ejército (EN) y la Policía Nacional (PN), donde trataron, entre otros temas la situación de indocumentación y movilidad de los y las trabajadores haitianos en la región, y la visita, y regreso, que realizan a su país cada fin y comienzo de año.
El licenciado Víctor Peña, presidente de ADOBANANO, consideró que este espacio es propicio para buscar alternativas de solución, “con propuestas claras”, ante la problemática migratoria en la línea noroeste.
Agradeció que los diversos sectores reunidos en su local, hayan tomado en cuenta a la organización de productores porque “esta representa la garantía del sector” agroindustrial exportador.
El agrónomo Benigno Toribio Guzmán, coordinador del departamento de Migrantes de SF, valoró como positivo el inicio y búsqueda de solución a los problemas migratorios en la región, la que según nos afecta a todos “tanto a los productores, como a la sociedad civil, así también a las autoridades de la DGM, el Ejército y la Policía y, especialmente, a los obreros/as inmigrantes haitianos residentes en las zonas agrícolas”
Toribio planteó que hay que iniciar la búsqueda de solución migratoria empezando por la indocumentación y la falta de movilidad que tienen los obreros/as en toda la línea noroeste, los cuales, en momentos se ven limitados a satisfacer algunas de sus necesidades tales como acudir a centros hospitalarios de las provincias por los “controles militares” establecidos en la zona donde laboran.
En tanto, el padre Regino Martínez Bretón, director de Solidaridad Fronteriza (SF), perteneciente a la compañía de Jesús, aclaró que el trabajo que hace la institución de coordinación y acompañamiento a las asociaciones comunitarias, de campesinos, de mujeres, de juntas de vecinos y de migrantes en la región noroeste, obedece a que ellos son parte de la diócesis Mao-Montecristi que dirige monseñor Diomedes Espinal.
Regino manifestó la alusión a la presencia de los migrantes haitianos que hizo en su discurso, al inicio de su toma de posición en la diócesis, el obispo Espinal. Y, en ese sentido reclamó que como iglesia, como pastor, como personas que acompañamos van tras la mejoría en el nivel de vida a través de la organización y respeto a los derechos laborales y todo lo que signifique respeto de los Derechos Humanos.
“Solidaridad Fronteriza está apoyando el trabajo legal y la justicia y no apoya la ilegalidad, en ningún momento, en todo lo que sea frontera”, sentenció el sacerdote jesuita.
De su lado Gianni Dalmas, representante de los productores Plantaciones de del Norte solicitó a los representantes DGM la permisión de la traída de las parejas a los obreros inmigrantes haitianos en la razón de que con la misma se reducirían el costo de la vida que tiene cada labriego viviendo sólo.
Habrá viaje y regreso de fin de año:
Los oficiales de la DGM, General (r) Rafael Florian Florian, encargado de asuntos haitianos, y el subdirector Juan Isidro Pérez vieron oportuna la propuesta hecha por los dirigentes de los/as obreros/as de ASOMILIN, que trabajan en las plantaciones agrícolas de las provincias de Mao-Valverde y Montecristi de que podrán salir y regresar a pasar sus vacaciones con sus familiares en Haití, para tal fin se producirá otra reunión el mes próximo en ADOBANANO.
En el encuentro estuvieron presentes los Generales Napoleón Terrero, del Ejército, y Mario Torres Pulinario de la Policía Nacional, con asiento en Mao Valverde, línea noroeste, quienes se comprometieron, como auxiliares, a dar cumplimiento a las propuestas consensuadas de ley hecha a los miembros de la DGM.
Las cifras:
Alrededor de 163 mil tareas están sembradas de guineo orgánico (en su mayoría) y tradicional para la exportación, las cuales en un 85 por ciento va a los mercados europeos y el restante EE.UU. y el Canadá, entre otros destinos. Obteniendo el país más de US 80 millones al año, según datos de Adobanano.
La mayor cantidad de tierra en producción de guineo está ubicada en la línea noroeste, mayormente en las provincias de Mao-Valverde y Montecristi las cuales son trabajadas en gran proporción por inmigrantes haitianos residentes allí.
El licenciado Víctor Peña, presidente de ADOBANANO, consideró que este espacio es propicio para buscar alternativas de solución, “con propuestas claras”, ante la problemática migratoria en la línea noroeste.
Agradeció que los diversos sectores reunidos en su local, hayan tomado en cuenta a la organización de productores porque “esta representa la garantía del sector” agroindustrial exportador.
El agrónomo Benigno Toribio Guzmán, coordinador del departamento de Migrantes de SF, valoró como positivo el inicio y búsqueda de solución a los problemas migratorios en la región, la que según nos afecta a todos “tanto a los productores, como a la sociedad civil, así también a las autoridades de la DGM, el Ejército y la Policía y, especialmente, a los obreros/as inmigrantes haitianos residentes en las zonas agrícolas”
Toribio planteó que hay que iniciar la búsqueda de solución migratoria empezando por la indocumentación y la falta de movilidad que tienen los obreros/as en toda la línea noroeste, los cuales, en momentos se ven limitados a satisfacer algunas de sus necesidades tales como acudir a centros hospitalarios de las provincias por los “controles militares” establecidos en la zona donde laboran.
En tanto, el padre Regino Martínez Bretón, director de Solidaridad Fronteriza (SF), perteneciente a la compañía de Jesús, aclaró que el trabajo que hace la institución de coordinación y acompañamiento a las asociaciones comunitarias, de campesinos, de mujeres, de juntas de vecinos y de migrantes en la región noroeste, obedece a que ellos son parte de la diócesis Mao-Montecristi que dirige monseñor Diomedes Espinal.
Regino manifestó la alusión a la presencia de los migrantes haitianos que hizo en su discurso, al inicio de su toma de posición en la diócesis, el obispo Espinal. Y, en ese sentido reclamó que como iglesia, como pastor, como personas que acompañamos van tras la mejoría en el nivel de vida a través de la organización y respeto a los derechos laborales y todo lo que signifique respeto de los Derechos Humanos.
“Solidaridad Fronteriza está apoyando el trabajo legal y la justicia y no apoya la ilegalidad, en ningún momento, en todo lo que sea frontera”, sentenció el sacerdote jesuita.
De su lado Gianni Dalmas, representante de los productores Plantaciones de del Norte solicitó a los representantes DGM la permisión de la traída de las parejas a los obreros inmigrantes haitianos en la razón de que con la misma se reducirían el costo de la vida que tiene cada labriego viviendo sólo.
Habrá viaje y regreso de fin de año:
Los oficiales de la DGM, General (r) Rafael Florian Florian, encargado de asuntos haitianos, y el subdirector Juan Isidro Pérez vieron oportuna la propuesta hecha por los dirigentes de los/as obreros/as de ASOMILIN, que trabajan en las plantaciones agrícolas de las provincias de Mao-Valverde y Montecristi de que podrán salir y regresar a pasar sus vacaciones con sus familiares en Haití, para tal fin se producirá otra reunión el mes próximo en ADOBANANO.
En el encuentro estuvieron presentes los Generales Napoleón Terrero, del Ejército, y Mario Torres Pulinario de la Policía Nacional, con asiento en Mao Valverde, línea noroeste, quienes se comprometieron, como auxiliares, a dar cumplimiento a las propuestas consensuadas de ley hecha a los miembros de la DGM.
Las cifras:
Alrededor de 163 mil tareas están sembradas de guineo orgánico (en su mayoría) y tradicional para la exportación, las cuales en un 85 por ciento va a los mercados europeos y el restante EE.UU. y el Canadá, entre otros destinos. Obteniendo el país más de US 80 millones al año, según datos de Adobanano.
La mayor cantidad de tierra en producción de guineo está ubicada en la línea noroeste, mayormente en las provincias de Mao-Valverde y Montecristi las cuales son trabajadas en gran proporción por inmigrantes haitianos residentes allí.
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