TONY RODRIGUEZ LA ISLA DIGITAL.R.D.
El Colegio Dominicano de Periodistas cree que en el país hay personas que se dedican a dañar reputaciones y buenas honras a través de los medios de comunicación y se siente preocupado por el auge que ha tomado en los últimos meses.g
Aurelio Henríquez, al referirse a la denuncia hecha por el abogado Negro Veras y a las recientes declaraciones de Monseñor Benito de la Rosa y Carpio, precisó que realmente a diario se observa cómo, a través de programas de radio, televisión, la prensa digital, se dañan reputaciones de personas honestas que se han dedicado al trabajo y que tienen una vida sana en la sociedad dominicana.
Aunque pidió al destacado abogado que someta a la justicia a quienes intentaron dañar la honra de su familia, ofrezca los detalles a las autoridades y deje que sea la justicia quien se encargue de castigar a los responsables.
Sin embargo, dijo que esas mismas personas utilizan su fortuna para tratar de vender una imagen distinta a la que tienen realmente, invirtiendo para ello cuantiosos recursos en los medios de comunicación.
Atribuyó esa descomposición social que se está dando en algunos medios de comunicación a la cantidad extraordinaria de personas no calificadas que se enganchan al periodismo, que por el simple hecho de tener dinero para pagar un espacio, los ejecutivos de medios le abren las puertas con programas, cuyo trabajo principal es buscar dinero a cualquier precio, sin importar si dañan o no reputaciones de buenos dominicanos.
Señaló que esta situación ha llegado al extremo de que se han desarrollado grupos económicos y políticos, que pagan espacios y a personas para que los defiendan y ataquen a sus rivales a través de sus espacios en los medios de comunicación.
No obstante, dijo que no sólo son los enganchados a periodistas que ejercen “el sicariato” moral, como lo señala el doctor Negro Veras, sino también que organismos de inteligencia y de seguridad del Estado filtran informaciones maliciosas para afectar moralmente a terceros a través de individuos que ejercen la comunicación sin ningún apego a la ética y a la moral.
El presidente del CDP informó que en algunas ocasiones periodistas se le han acercado para consultarle sobre informaciones que le han filtrados esas agencias, sobre algunos episodios registrados en el país, pero que estas no tienen base de sustentación legal y se observa que su interés es distorsionar la realidad de hechos y afectar a terceros.
Instó a los periodistas a no dejarse sorprender y antes de emitir un mensaje que lo confirmen y no se hagan ecos de informaciones que no tengan forma de demostrar su veracidad y actúen siempre apegado al Código de Etica.
Henríquez reitera que algunos administradores y propietarios de medios de comunicación utilizan a personas no calificadas para no tener compromisos económicos con los periodistas ni con el gremio profesional que los agrupa.
Precisó que en esta situació
n el CDP está limitado porque no puede obligar a los supuestos periodistas a apegarse al Código de Etica del gremio, como ha hecho con sus miembros, que en varias ocasiones han sido sancionados por el Tribunal Disciplinario.
El presidente del CDP pidió al Congreso Nacional y al Poder Ejecutivo que, junto al Colegio de Periodistas se aboquen a modificar la ley de colegiación a fin de que el ejercicio del periodismo sea para los egresados de una escuela de comunicación y así sanear el ejercicio del periodismo dominicano y recordó que nadie puede ejercer la medicina, la ingeniería, el derecho u otras áreas del saber, si no cumplen con las leyes que regulan esas profesiones, ya que el periodismo es tan sensible como hacer una cirugía de corazón abierto.
El CDP condena esa acción y exige a los propietarios y administradores de los medios de comunicación que los espacios en los medios deben ser ocupados por profesionales de la comunicación, quienes tienen el compromiso moral y social de llevar informaciones oportuna y a tiempo a la sociedad dominicana.
Alertó a que no permitan espacios a personas que se hacen pasar por periodistas, que no conocen el compromiso social que tienen los medios de comunicación y que ellos sirven de caja de resonancia de sectores mal sano para hacer daños.
Entiende que si bien es cierto que los medios de comunicación social son empresas, también es cierto que son una empresa de carácter social, que el Estado otorga una licencia para operarlo, (caso de las frecuencias de televisión y radio), pero tiene que cumplir su función de informar, educar y entretener a la sociedad en sentido general.
Dijo que existen muchas personas no calificadas para hacer uso de los medios masivos de comunicación, por no tener ninguna preparación académica, moral y ética y mucho menos el conocimiento de la ley 6132 sobre Expresión y Difusión del Pensamiento.
Aurelio Henríquez, al referirse a la denuncia hecha por el abogado Negro Veras y a las recientes declaraciones de Monseñor Benito de la Rosa y Carpio, precisó que realmente a diario se observa cómo, a través de programas de radio, televisión, la prensa digital, se dañan reputaciones de personas honestas que se han dedicado al trabajo y que tienen una vida sana en la sociedad dominicana.
Aunque pidió al destacado abogado que someta a la justicia a quienes intentaron dañar la honra de su familia, ofrezca los detalles a las autoridades y deje que sea la justicia quien se encargue de castigar a los responsables.
Sin embargo, dijo que esas mismas personas utilizan su fortuna para tratar de vender una imagen distinta a la que tienen realmente, invirtiendo para ello cuantiosos recursos en los medios de comunicación.
Atribuyó esa descomposición social que se está dando en algunos medios de comunicación a la cantidad extraordinaria de personas no calificadas que se enganchan al periodismo, que por el simple hecho de tener dinero para pagar un espacio, los ejecutivos de medios le abren las puertas con programas, cuyo trabajo principal es buscar dinero a cualquier precio, sin importar si dañan o no reputaciones de buenos dominicanos.
Señaló que esta situación ha llegado al extremo de que se han desarrollado grupos económicos y políticos, que pagan espacios y a personas para que los defiendan y ataquen a sus rivales a través de sus espacios en los medios de comunicación.
No obstante, dijo que no sólo son los enganchados a periodistas que ejercen “el sicariato” moral, como lo señala el doctor Negro Veras, sino también que organismos de inteligencia y de seguridad del Estado filtran informaciones maliciosas para afectar moralmente a terceros a través de individuos que ejercen la comunicación sin ningún apego a la ética y a la moral.
El presidente del CDP informó que en algunas ocasiones periodistas se le han acercado para consultarle sobre informaciones que le han filtrados esas agencias, sobre algunos episodios registrados en el país, pero que estas no tienen base de sustentación legal y se observa que su interés es distorsionar la realidad de hechos y afectar a terceros.
Instó a los periodistas a no dejarse sorprender y antes de emitir un mensaje que lo confirmen y no se hagan ecos de informaciones que no tengan forma de demostrar su veracidad y actúen siempre apegado al Código de Etica.
Henríquez reitera que algunos administradores y propietarios de medios de comunicación utilizan a personas no calificadas para no tener compromisos económicos con los periodistas ni con el gremio profesional que los agrupa.
Precisó que en esta situació
n el CDP está limitado porque no puede obligar a los supuestos periodistas a apegarse al Código de Etica del gremio, como ha hecho con sus miembros, que en varias ocasiones han sido sancionados por el Tribunal Disciplinario.
El presidente del CDP pidió al Congreso Nacional y al Poder Ejecutivo que, junto al Colegio de Periodistas se aboquen a modificar la ley de colegiación a fin de que el ejercicio del periodismo sea para los egresados de una escuela de comunicación y así sanear el ejercicio del periodismo dominicano y recordó que nadie puede ejercer la medicina, la ingeniería, el derecho u otras áreas del saber, si no cumplen con las leyes que regulan esas profesiones, ya que el periodismo es tan sensible como hacer una cirugía de corazón abierto.
El CDP condena esa acción y exige a los propietarios y administradores de los medios de comunicación que los espacios en los medios deben ser ocupados por profesionales de la comunicación, quienes tienen el compromiso moral y social de llevar informaciones oportuna y a tiempo a la sociedad dominicana.
Alertó a que no permitan espacios a personas que se hacen pasar por periodistas, que no conocen el compromiso social que tienen los medios de comunicación y que ellos sirven de caja de resonancia de sectores mal sano para hacer daños.
Entiende que si bien es cierto que los medios de comunicación social son empresas, también es cierto que son una empresa de carácter social, que el Estado otorga una licencia para operarlo, (caso de las frecuencias de televisión y radio), pero tiene que cumplir su función de informar, educar y entretener a la sociedad en sentido general.
Dijo que existen muchas personas no calificadas para hacer uso de los medios masivos de comunicación, por no tener ninguna preparación académica, moral y ética y mucho menos el conocimiento de la ley 6132 sobre Expresión y Difusión del Pensamiento.
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