¿Por qué somos idealistas sólo cuando somos jóvenes? ¿Qué pasó con el espíritu revolucionario que alimentó la imaginación de un mundo mejor? ¿Por qué dejamos arrastrar en la mediocridad a nuestros sueños con el opio del ocio y la complacencia? ¿Por qué un hombre como el Profesor Juan Bosch en plena edad para retirarse, en vez de hacerlo, se entregó en cuerpo y alma a un proyecto de partido de ideas más radicales que las del PRD, mientras que otros se irritan al escuchar que debemos aun mejorar más?
La comodidad es una asesina de sueños. Sacrificamos nuestros sueños ante los dioses de la comodidad y la facilidad. Nuestra derrota ante la comodidad se inicia cuando empezamos a sentirnos satisfechos con el nivel de nuestros logros.
En America Latina gobiernos van y gobiernos vienen, pero realmente son muy pocos los logros que de manera indiscutible se puedan presentar en beneficio de las grandes mayorías. Sea cual sea la razón, lo cierto es que las necesidades de nuestros pueblos son inconmensurables, mientras que los recursos económicos y humanos son extremadamente limitados.
Sin embargo, como se ha demostrado en República Dominicana, hemos sido capaces de hacer crecer nuestra economía de una manera verdaderamente extraordinaria. Pero si no logramos transferir de una forma incuestionable esa bonanza a las grandes mayorías, poco sentido tendría el accionar en política y mucho menos llegar al poder. Como es sabido, el crecimiento económico no necesariamente implica desarrollo y la máxima responsabilidad de los políticos al servicio de sus pueblos es obtener el desarrollo con justicia social.
El próximo domingo 20 de Marzo el Comité Central del Partido de la Liberación Dominicana –PLD- se reunirá para definir aspectos fundamentales relacionados con las elecciones presidenciales del 2012. De su parte, el Partido Revolucionario Dominicano –PRD- ya seleccionó su candidato, el cual no cuenta con una hoja de desempeño presidencial muy deseada. Ahora que se sabe de que fue capaz Hipólito Mejía desde el poder y que Balaguer no está presente para el amarre de la chiva, lo que se vislumbra es que a ese candidato le vaya peor, aun y con el desgate natural que causa en el PLD el haber estado en el poder en dos periodos consecutivos.
En el año 2004 el Dr. Leonel Fernández se convirtió en la esperanza que el pueblo dominicano soñó para que lo sacara del atolladero en que lo sumió Hipólito Mejía, el PPH y el PRD. Con todos y los inconvenientes e imperfecciones hoy podemos decir: ¡Misión cumplida!
Sin embargo, grandes retos aun están pendientes para hacer de nuestro país un lugar más justo y prospero para todos; un lugar donde la existencia de oportunidades eliminen de las mentes de nuestros jóvenes profesionales la necesidad de entregar sus talentos a otros países o adherirse a las normas del crimen organizado; un lugar donde se inicie una nueva visión filosófica del joven que deseamos educar para el bien de los intereses globales del país; un lugar donde los mejores profesionales al servicio del estado hagan al mismo las más grandes contribuciones en aras de elevar la calidad de vida de toda la población y en especial la del hombre del campo, enseñándole a éste como maximizar el recurso preciado de la tierra; un lugar donde cristalicemos la competitividad en la producción y los servicios para garantizar un sólido posicionamiento en nuestras exportaciones; un lugar en fin donde podamos capitalizar la base de sustentación económica creada en los últimos dos periodos y con nuevas innovaciones, creatividad y fundamentalmente confiados podamos reinyectar en el pueblo dominicano la energía que da “la audacia de la esperanza”.
¿Qué debe garantizar el PLD a partir del próximo domingo 20 de Marzo para mantener su aceptación en el pueblo dominicano como fuente de esperanza para progresar en la solución de sus problemas? A mi modo de ver tres aspectos importantes: 1) demostrar que aun es indiscutiblemente diferente al PRD al momento de tomar decisiones transcendentales, 2) que los potenciales precandidatos demuestren la altura de su madurez al evitar la atomización de las fuerzas internas, y 3) desarrollar una campaña en la que la calidad del discurso garantice inteligentemente la armonía e integración de toda la organización en el proceso electoral. En una semana estaremos –Dios mediante- viviendo en el después, y estoy seguro que sobre todas las cosas la claridad del cielo nos permitirá visualizar claramente los sueños de Duarte y Bosch posicionados en el horizonte dominicano. Nuestro objetivo es asegurarnos de llegar a ellos.
*Ramón Santana- Consultor Privado en Tecnología Analítica de Procesos (PAT). Actual Miembro del CC del PLD por Bronx, Nueva York. Todos los derechos reservados. |
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario