POR VALENTIN ABREU
SANTIAGO. El padre de una joven madre asesinada por su esposo, quien fue condenado a 20 años de cárcel por la justicia de Mao, hizo un llamado a los jueces de La Vega a no dejarse sorprender por el pedimento de libertad condicional de los abogados del asesino.
Juan de Jesús Santos Mora, padre de la asesinada Yahaira de Jesús Santos Fuertes, manifestó que el asesino Plinio Antonio Blanco Valenzuela, de 54 años, no merece la libertad condicional tras haber cumplido la mitad de la pena.
Explicó que aquel fue un crimen premeditado y con alevosía, cuyo autor merecía condena de 30 años, y que la justicia de Mao solo le aplicó 20 alegando ausencia de testigos en el caso, según dijo él que le explicaron los jueces.
Además dijo que el homicida y asesino masacraba a su hija constantemente y que tenia un historial de violencia en su contra; “la humillaba y la obligaba a bajar desnuda a la planta baja desde el segundo nivel de la casa en que Vivian, en la ciudad de Nueva York”.
De los Santos Mora narró que Blanco Valenzuela lo llamó por teléfono desde Nueva York el 26 de septiembre del año 2000, para anunciarle que iba a matar a su hija. “Yo le dije muchacho Dios te libre. Y me quedé muy preocupado”.
El hombre envió primero a Yahaira al país, y luego, el día 2 de octubre del referido año, regresó él, añadió el entristecido padre. Luego el 5 de octubre del citado año, ocurrió el hecho de sangre, cuando la pareja regresaba de Santiago a Mao, acompañada de sus dos hijos de 2 y 3 años de edad, a bordo de una jipeta.
Y en presencia del que entonces tenía 3 años la mató de cuatro balazos. Previamente procedió a llamar al papá de su esposa, el señor Santos Mora, y éste le respondió la llamada minutos después de llegar a su casa donde una secretaria suya le informó que llamara a su suegro.
Y acto seguido, contó el atribulado progenitor, escuchó varias detonaciones (“mas de cuatro”, precisó), aunque solo esta cantidad impactó su cuerpo. Según dijo el padre, Blanco Valenzuela no califica para libertad condicional debido a que asesinó a la hija suya con premeditación y alevosía, y porque además no ha observado buena conducta, pues alegó que el reo ha intentado fugarse de las cárceles de Mao y Santiago.
Sostiene que el hombre dio muerte a su hija para no darle lo que le tocaba en la partición de los bienes que tenían. “Ni siquiera le dio 200 mil pesos que le ofreció como arreglo”, agregó. “La mató aquí porque no le convenía hacerlo en Estados Unidos”.
“Me mató a mi hija cuando se la llevó dizque a pasear y era para divorciarse allí, aprovechando el regreso a Mao para asesinarla”, se quejó el señor Santos Mora.
Blanco Valenzuela guarda prisión en la Cárcel de La Vega. Mora Santos sostuvo que tiene confianza en la justicia vegana “porque la componen gente seria que no se van a prestar a ningún chanchullo”. Dijo temer por su vida y la de otros familiares, pues alega que el reo es “sumamente violento”.
Y pidió al juez de ejecución de la pena, doctor Manuel Ramón González Espinal, quien conocería la petición de los abogados de Blanco Valenzuela de libertad condicional de su cliente, no dejarse sorprender por una jugada dirigida a burlar la justicia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario