ARTICULO DE OPINION
Por Claudio Márquez
Danilo Medina es un hombre de visión. Comprometido con los mejores intereses del país, ha comenzado a transitar los caminos del éxito.
Resulta difícil hablar de un político, pero creo que Danilo es una excepción dentro de las reglas, dada su entrega, su capacidad de sacrificio, pero sobre todo su entereza y entereza en la actividad política.
Danilo Medina es un político que suma, al que se adhieren las nuevas voluntades de la nación y con el que es posible dialogar, discutir y proyectar soluciones efectivas a los problemas del país. Es como lo observo cada vez que concurro a una de esas actividades coordinada por su equipo de trabajo para abordar temas relacionados con la marcha social, económica, política, educativa e institucional de la nación.
Hace exactamente una semana, el licenciado Danilo Medina estuvo por los predios de Santiago.
Mi esposa, Ramona Rodríguez, me instó a concurrir a un encuentro al que previamente había sido invitada por un grupo de amigos, técnicos y profesionales, comprometidos con el pensamiento político de este destacado dirigente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD). Allí estuve con ella, en primera fila y, en verdad, que valió la pena.
Danilo volvió a evidencia que como político y aspirante a ceñirse la banda presidencial cuenta con la experiencia y la formación de Estado necesaria para encarrilar la sociedad dominicana por el camino del crecimiento económico y el bienestar social.
Su planteamiento, en el sentido de que su misión como futuro presidente es que “los frutos de la riqueza lleguen a cada uno de los dominicanos”, es una formulación de importancia básica en la comprensión y direccionalidad de su discurso público, de su visión de Estado, pero además de su concepto sobre el desarrollo.”
En la semana que acaba de concluir cerca de 1,400 seguidores del licenciado Medina Sánchez, agrupados en el Movimiento Político “Avalancha”, se reunieron en la capital dominicana para refrendar su identificación con las propuestas de del aspirante presidencial peledeísta, y allí, tal como ocurrió en la ciudad de Santiago, durante el acto de lanzamiento del Movimiento “Consenso con Danilo”, celebrado (a casa llena) en el Hotel Gran Almirante, volvió a comprobarse su claridad de pensamiento y cómo ha ido calando en el sentir de la población.
Ahora que la alta dirección del PLD comienza hablar de la celebración de su VIII Congreso, es oportuno subrayar que este evento debe constituir, además de una sólida expresión de unidad, de confirmación de su liderazgo como organización de avanzada, compelida a tomar lo mejor dentro de sus propuestas presidenciales.
Bosch decía que la política no es un juego, a lo que nosotros agregamos que tampoco un eslabón para la componenda fría. En el proyecto presidencial del licenciado Danilo Medina vemos, pues, la alternativa más idónea para garantizar la continuidad de la obra de Gobierno peledeísta, para corregirla y adentrarnos a una etapa de crecimiento sostenido mediante una reformulación de los roles del Capital Social y su adecuación a las metas de desarrollo que nos hemos propuesto.
Es la razón por la que vemos ahora al licenciado Danilo Medina transitando por el camino del éxito.
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